En Octubre
de 2011 debuté como pasajero sujeto a espacio. Éramos un grupo de 6 compañeros
de oficina que íbamos a conocer Denver. Dos del grupo iban a un reci de Foo
Fighters, el resto acompañaba y conocía los alrededores (es una linda ciudad!).
Llegamos al
aeropuerto, y ya nos la vimos complicada cuando el Jefe de Base nos dijo:
reservaron los remises para volverse a su casa esta noche? FUCK! Resulta que
otra aerolínea había cancelado y pasaron sus pasajeros a los vuelos de la que
yo trabajo, generando sobreventa.
Teníamos
tres opciones: Miami, Dallas y nuevamente Miami. En ese orden salían los
vuelos. De ahí, conectábamos a Denver. Se hacía la hora de salida del vuelo, y
nadie se acercaba a decirnos: suben tal, tal y tal (así funciona).
Siendo las
19.15 y saliendo la primera opción a las 20 hs, se acerca un chica y escucho:
Manzotti, sube. Los miré a mis compañeros con una cara de terror absoluto. Era
el único de los 6 que subía en ese vuelo. Corré que no llegás me gritaban! (Tenía
que hacer seguridad y migraciones, aún). Pero qué hago? A dónde voy? Cómo hago
cuando llego a Miami??
Corrí y pedí
permiso. Algunos pasajeros me dejaban pasar, otros no. Entre los nervios de no
llegar, y los nervios de cómo carajo iba a hacer para llegar a Denver no podía
más. Estaba más cagado en las patas que no se qué. Salgo de migraciones y
corro. En eso una chica de la puerta de embarque me grita, Manzotti? Sí,
respondo! Vení que se va el vuelo!!
Me dan la
tarjeta de embarque, y me había tocado primera clase. Asiento 4G. Subí al avión,
seguía con miedo. Me tranquilizó reconocer a una de las tripulantes, con las
cuales había estado dos semanas atrás en un evento que organizamos los
empleados de la empresa. Me acuerdo que le dije, cómo hago cuando llego? Y me
respondió: vos seguí al resto y no te vas a perder. Consejo sencillo, pero dio
resultado.
El avión
despegó, no lo podía creer. Empezaba toda una aventura. Era mi primer salida
del país. Mi primer vuelo de tantas horas. La alegría se mezclaba con el miedo
y la incertidumbre. Esa noche se me cruzaron muchas ideas, una fue quedarme en
el aeropuerto todo el día y volverme en el primer vuelo a Buenos Aires. Estaba
asustado. Apenas dormí.
Había
perdido contacto con mis compañeros de vuelo. Rogaba que hubiesen podido subir
en los vuelos posteriores. Habíamos quedado en que me mandaban un sms con las
novedades, y yo lo iba a ver una vez que llegase a Miami.
Y ahí
estaba yo, sentadito en mi 4G, sobrevolando el Amazonas. Camino a Miami, chico!
JM
Hay Juanchi, como sigue, Me quedé muy intrigada ????
ResponderEliminarme quede con ganas de leer el resto!!
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